martes, 25 de noviembre de 2014

Lección 1: "Yo no tengo el control"

Hace tiempo abandone el blog, pero no abandone mi deseo de escribir. Se que es una de las herramientas que mejor me funciona para conocerme.

Así como casi siempre me sucede, esta fue una idea que me llego mientras dormía y decidí escuchar a mis sueños. Yo soy YO, la experiencia que me permite hablar de estos temas es que tengo una Maestría en mi vida y esas experiencias me han llevado a lo que hoy creo que es mi misión: Convertirme en la mejor versión de mi misma y en el camino ayudar a quien se cruce por estas lineas a saber que no esta solo, que no es el único que pasa por un problema y que aunque es difícil de creer a ratos, todo esta perfecto como esta, porque así tiene que ser.

Es por esto que me di a la tarea de empezar a aprender y compartir una lección al día. Solo tenemos hoy y no hay que desperdiciar ni un instante sin evolucionar. Esto que les comparto lo he aprendido en la escuela de la vida, muchas conversaciones y otros cuantos libros.

La lección de hoy: "Me libero de la ilusión del control para dejar que las cosas fluyan como son."

Por tantas razones y miedos del pasado desarrollamos una necesidad de tener el control sobre las situaciones, las personas, sobre nuestra vida. Creyendo que de esta manera podremos evitar el volver a vivir ese sufrimiento, cuando en realidad solo nos convertimos en víctimas de esos miedos que nos alejan de ser felices y estar en paz.

Ese miedo que nos impulsa a tener el control es el verdugo del amor que ya existe dentro de nosotros. Solo tu dependes de ti, nada más.

Cuantas veces nos encontramos inmersos en deseos de tener una bola  de cristal para poder saber/controlar lo que va a pasar y dejamos de vivir el HOY que es el único que en realidad existe. En otras ocasiones ya he hablado de esto, en lo personal es uno de los aprendizajes que mas me han costado trabajo, pero que mayor felicidad han traido.

Cuando dejas de querer controlar todo lo que sucede a tu alrededor te liberas de la ansiedad que esto provoca, causando hasta estragos en tu salud física. En lugar de querer tener hilos de marioneta hacia todo lo que te rodea, hoy, solo por hoy prueba ocuparte de tus responsabilidades, de lo que te toca y esta en tus manos, para ser solo un observador de como el mundo gira, no lo puedes detener y las cosas suceden como deben de suceder. Observate y cuando te caches quieriendo controlar a algo o a alguien date un respiro, cierra los puños con fuerza durante 3 minutos, con todas tus fuerzas. Al terminar ese tiempo abre lentamente tus manos y siente la sangre de nuevo correr por tus dedos, siente que libre pasa el aire, que libre eres cuando sueltas.

Los dejo por hoy con esta reflexión y los invito a que me acompañen en este viaje que decidí emprender.

Mucha luz, mucho amor y toda mi energía. Les deseo de regreso diez veces lo que me desean a mi.

Con cariño,
Mónica.

martes, 29 de julio de 2014

ENTONCES ME AME...


Llego un momento en el que me veía al espejo y no era yo quien estaba en ese reflejo. Deje de reconocerme, de verme con mis propios ojos. Seguía siendo yo… no, no estoy segura.

Tantos años escuchando que comencé a creerlo. El espejo no mentía, eran mis ojos los que habían cambiado, sí seguía siendo yo. Pero aquella loca acelerada con sonrisa que enseñaba todos los dientes, soltando carcajadas interrumpidas por un ronquido con aires de cochino, que no conocía la pena y jamás titubeo ante el miedo del fracaso, parecía haber sido solo un recuerdo inventado por mi memoria. Esa no era yo, llegue a dudar si alguna vez fue cierto eso que creí que siempre fui.

Estaba de vacaciones, escondida en el baño probándome un traje de baño tras otro, agarrando valor para siquiera asomar la nariz. Recordaba como era mi cuerpo antes, tan perfecto… y en ese tiempo me parecía abominable, no entendía ¡¿Porqué?!

El culpable… el culpable no es nadie, pero si es todo, todos y al mismo tiempo solamente yo. Fui dejando que el ruido de palabras dañinas envenenaran mi cabeza, que se encargó de repetir un millón de veces cada defecto, cada faltante, todo lo que me alejaba de aquella “perfección”. Que después de tanto tiempo llegaron a mi corazón… y sí, deje de amarme, me convertí en el ser que mas “asco” provocaba en mi.

Empecé primero desconociendo mi “cascarón” que se convirtió en ajeno, creyendo que hasta era una cruz, mi mayor defecto. Como olvidar aquella vez en que escuche “que ser tan bonita era mi mayor defecto”, acompañada de una lista de sugerencias de operaciones que necesitaba.

Poco a poco el veneno me fue alienando de quien habitaba en mi corazón, ya no era solo mi cuerpo... deje de admirarme, deje de creer que era un ser digno de recibir algo más porque ilusa era si creía que lo merecía. Empecé a creer que lo único que tenía era mi cara y ni siquiera era suficiente, que mi sueño de cambiar al mundo era demasiado para mi. Tantas veces me repetí juicios tan negros hacia mi que negra me vi.

Aleje de mi vida a quienes alimentaban este veneno, los corrí o solo se fueron. Me canse de escuchar tantas veces lo que no soy, no tengo, no puedo. Era demasiado tarde, sus palabras ya se habían mudado dentro de mi. Tuve que comenzar una revolución en mi contra pero por mi propio bien.

Y fue ahí frente a un espejo que me veía de nuevo pero como si fuera por primera vez, reflejaba esa YO que siempre ha estado conmigo. En mi mente comenzó a sonar la canción “Tu eres perfecta” de Oscarcito, tan fuerte y tan clara que juro que sonaba en alguna bocina cercana. Me la repetí una y otra vez, me liberaba. Dejaba de odiarme, dejaba de creer que yo era eso que me dijeron; mientras cantaba y bailaba encerrada en un baño de 2 m2 regresaba aquella loca que se amaba y volvía a adorar cada centímetro de mi. Esta vez mas madura, mas mujer, mas fuerte, dispuesta a blindar oídos, mente y corazón a palabras necias. 

Comencé a contar cada estría que dejo mi embarazo, bautizandola con el recuerdo de algún momento que pase esperando al pequeño Cio. Acepte que mi abdomen firme dejo de existir por ser el nido de un gran ser humano, que mi pecho ya no era aquel que parecía modelado por cirujanos perfecto e intacto, porque alimento nueve meses al mas maravilloso ser. Que mi cuerpo no volverá a ser el de antes, porque gracias a Dios YO tampoco volveré a ser la de antes. 

Recordaba mi sentido del humor, mi capacidad de reírme una y otra vez de mis errores, mi empatía con el dolor ajeno, mis ganas de cambiar el mundo… Y esta vez, ahora si estoy segura de que lo puedo hacer.

Acabe de cantar la canción, deje de bailar obedeciendo a mis piernas que no daban mas. Volví la mirada al espejo y... ¡ENTONCES ME AME!


Mucha luz, mucho amor y toda mi energía. Me despido por hoy pero no para siempre. Espero que quien me lea le sirva, les deseo de regreso diez veces lo que me desean a mi.

Con Cariño,
Mónica Makaco

jueves, 26 de junio de 2014

YA NO MÁS CAMPAÑAS SIN MUJERES FUTBOLERAS


Mujercitas hermosas, seres humanos en general… pero sobre todo mis colegas femeninas, es momento de que hagamos una revolución. Ok, suena un poco extremo pero no esta tan loca mi idea, lo prometo.

Invadidos por la fiebre mundialista y la serie de comerciales que hacen… hicieron que explotara en mi una serie de emociones y pensamientos de molestia. No se como sea en otros países, pero aquí en mi “México lindo y queeeeriiiidooooo” el 99.9% de los comerciales van enfocados a como los hombres se “embrutecen” con el football, sacando al cavernícola que llevan dentro, lo peor es que los “pintan” orgullosos de ser estos homo sapiens de hace millones de años y haciendo burla a las mujeres mandándoles mandamientos, teniendo conversaciones idiotas alrededor del juego… Bastante machista el asunto.

Se que soy rara, pero no la única en mi especie, AMO el football, no soy ninguna experta pero me gusta, me gusta verlo, gritar como si fuera el director técnico, [tengo un gran parecido al Piojo en la manera de expresarme, jajaja], que no me hablen mientras esta el juego, analizar las jugadas, aprender cosas nuevas cada partido, porque repito no soy ninguna experta.

Creo que esto no es cuestión de sexo, es cuestión de gusto, de pasión, de ser de l@s que siempre tiene la esperanza de que ESTE mundial si lo gana México.

Lo que me preocupa no es tanto el tema del football, lo deprimente es ver como en esta época con algo que podría ser “universal”, hasta motivo de unión y entendimiento entre ambos sexos. Buscan hacer sentir superiores a los hombres, con cierto derecho por encima de nosotras “porque ven el football”. Todas esas campañas, bastante simpáticas, la verdad, pero en donde los hombres son románticos solo para “comprar tiempo” de poder ver el mundial… no me frieguen. Todas las mujeres involucradas en este deporte son objetos… las edecanes, las conductoras… hasta las de los comerciales que solo deben de “atender” al marido y “respetar”.

Que interesante sería que lograran hacer un comercial o publicidad enfocado a nosotros, seres humanos que nos gusta ver el football en donde las mujeres no fueran pintadas como “tontas” que caen en las mentiras mas baratas. A mi y mis amigas locas, [sobre todo Ana y Gise], que sudamos cada partido, tenemos amuletos… que en verdad lo vivimos. Que dejaran de alimentar los falsos egos de los niñitos tontitos que se creen que tienen ese súper poder. Se que a los hombres pensantes estarán pensando: “Relájate un buen Mónica, son solo comerciales y pequeñas bromas”, pero el trasfondo y lo que alimenta inconscientemente a nuestra sociedad es el mensaje de que los derechos y obligaciones son diferentes.

Si sabes de alguna publicidad, meme o broma en donde no se denigre a la mujer, alrededor del tema futbolístico, te agradecería que me lo dejes en los comentarios.

Los dejo por hoy, con esta pequeña observación de su servidora harta de recibir doscientos mil bombardeos de estos comerciales.

Con Cariño,
Mónica Makaco

viernes, 25 de abril de 2014

Marinero, ya no intentes zarpar...




“Y es que de nuevo caí,
como en aquellos años de adolescente
con corazón inconsciente
que se avienta de frente a sentir.
Pareciera que pasan los años
Y contigo yo nunca aprendí.

Marinero de este puerto,
Desembarcas en mi cuerpo
Y de prisa vuelves a embarcar.
En otro puerto, en otro cuerpo
Intentando escapar, huyendo
De eso que tanto temes…
No te vayas a enamorar.

Se que te escondes
Tras esas ojeras y tu cuerpo dibujado;
Esa actitud de Don Juan estudiado.

¡Hay marinero!
Te alejas de este puerto de nuevo,
Luchando contra la marea que te arrastra de regreso.
Te aterra la idea de abandonar tu navío,
Dejarlo a la deriva y desnudarte conmigo.

Baja ya el ancla, no intentes zarpar.
Te invito a mi playa, a orillas del mar;
No abandones tu navío,
Ni yo mis granos de arena y sal,
Eso es lo que hizo al mar llegarnos a juntar.

En mi playa hay un puerto,
En donde tu barco se puede quedar;
Tu barco estará en un puerto,
En donde yo estaré dispuesta a abordar.
Recorramos arenas, durmamos soles,
Despertemos con las estrellas,
Dejándonos mecer por las mareas,
Solo tu barco, mi puerto y el mar.

Vayamos en busca de tesoros,
De esos a los que nunca se les trazo un mapa,
Solo quien los posee los conoce.
Abre el cofre de tu corazón y compártelos conmigo
Y yo sin pensarlo te entregaré el mío.

Anda marinero, no intentes zarpar
Se valiente y admite que en este puerto te has de quedar.”

Mónica Makaco

Es que la inspiración llega así de golpe, de leer, escuchar, vivir y experimentar. Alimentarme de las historias que si no se escriben dejarían de pasar. Escuchando a Sabina, a mi madre, a mi abuela y a sus amigas platicar, en medio del bullicio que rondaba mi cabeza me he llegado ha inspirar, como hace mucho no me pasaba… supongo que ya me tenía que llegar.

martes, 22 de abril de 2014

Recordatorio...



No te enamores de aquel romántico que te escriba poemas y te mande flores, te dedique canciones con promesas de amores.

No te enamores de las ilusiones, ni de todas sus palabras. Enamórate de ese que no necesita prometerte nada.

No te enamores de ese que espera tanto de ti, nunca serás “suficiente”. Enamórate de quien no espera nada de ti, porque lo que recibe es todo lo que quiere.

No te enamores NUNCA solo de una linda cara, por lo general no vienen acompañadas de lindas intenciones.

No te enamores de un cuerpo, acuérdate que la gravedad y el tiempo no distingue sexo, religión, nacionalidad, o clase social.

Mucho menos vayas a enamorarte de una cartera, siempre creerán que todo tiene signo de pesos y se dejan llevar por las “temporadas”.

Ni por error confundas las mariposas con amor. Disfrútalas, pero no construyas sueños, tanto revoloteo de sus alas no serán buenos cimientos.

No te enamores de quien “te ve a los ojos” y sabes que solo esta pensando en lo que quieres hacer después de la cena. Enamórate del que se vaya en tu mirada hipnotizado por tus palabras.

No te enamores de ese que necesita de reflectores de la gente, mejor enamórate de uno que los traiga incluidos.

No te enamores de quien te de siempre la razón, sería lindo que fuera verdad que nunca estas mal… pero sabemos que no es así. Si no te debate no es más que un títere.

Invítalo a comer, si mastica con la boca abierta no te enamores de el. Solo recuerda todas esas veces que pasaste nauseas al ver en cámara lenta la comida pasear en la boca del individuo.

No te enamores si no tiene modales, porque así como se porta en la mesa será en la cama.

Tampoco vayas y busques a ese que sabe el “Manual de Carreño” a la perfección… si no cual sería la diversión.

No te enamores de ese que “te respeta tanto” que parece no tener ganas.

No te enamores del loco que te traiga tantas ganas, que te falte al respeto.

No te enamores de un hombre que no baila, el baile es solo la antesala. No importa que tan bien baila, si no la armonía de sus cuerpos. Además siempre las bodas son más divertidas si estas en la pista.

No te enamores de quien te guarde secretos, esos misterios solo se permiten si es porque intentará sorprenderte. Y si logra hacerte una sorpresa, FELICITALO, será el primero en tu vida en hacerlo. (Maldita intuición y sexto sentido, siempre cacho todas las sorpresas…)

No te enamores porque te quieran más… te acabaras sintiendo tan segura que dejarás de valorar las cosas.

No te enamores de quien tu quieras más… pasará exactamente lo mismo, solo que a ti no te valorarán.

Enamórate de quien te vea tan grande, tan alta, tan brillante como el, así no habrá competencias… ya sabes como eso termina.

No te enamores de alguien que no tenga una mascota, recuerda a tu abuelo: “Quien  no trata bien a los animales, mucho menos a las personas”.

No te enamores de quien solo admira tu cascaron, sabes que siempre se atraen por la envoltura de tu alma, pero si después de varias citas solo dice que “guapa” estas, no ve más allá que tus simples pellejos y seguro te dejara después por otra con mejores pellejos. Enamórate de alguien que cuando tenga que describirte hable de ti, no de tu cara, tu cuerpo y tu historia… que sepa quien eres.

No te enamores de alguien sin sueños, quien no sueña no llega lejos.

No te enamores de un mentiroso, te mentirá a ti y además acabará haciendo que le mientas a quien mas quieres. Y dar la cara después de lo ocurrido, ha como me costo trabajo.

No te enamores de una aventura, recuerda siempre que solo será una aventura.

No te enamores si no ponen reglas, pueden ser las reglas mas locas y sin sentido, pero si entre los dos tiene sentido puede ser la mejor relación que hayas tenido.

No te enamores de un hombre sin rutina, quien no muestra el compromiso en las cosas diarias como ir a trabaja, hacer ejercicio… no esperes que se comprometa a pasar mas de un mes contigo.

No te enamores de alguien sin tolerancia, la vida no siempre sale como la planeas, mucho menos siendo madre… las 6:00 pm pueden convertirse en las 8:00 pm por mil y un razones.

No te enamores… pero si ya te vas a enamorar no olvides lo que aprendes de quien por tu vida ha de pasar.

No te enamores… pero si decides enamorarte, que sea de quien también se enamore de ti… amar a solas, ya sabes como es.

La verdad es que no te recomiendo que te enamores, hoy en día hay pocos hombres sinceros, demasiados hombres ciegos que solo te ven como objeto y están en peligro de extinción los que se quieren comprometer, (y no hablo de anillo, campanas, vestido blanco y bodas), el simple compromiso de estar, poner reglas y seguir.

Pero si ya, sigues igual de terca en creer que el amor existe, enamórate de aquel que te inspire a borrar tantos “no” y solo te haga ver y sentir los “si”.

Mónica Makaco

martes, 25 de marzo de 2014

Curaciones a un corazón roto...

No se, pero estoy casi segura que todos, absolutamente todos los que lean estas líneas han vivido más de un desamor en sus vidas. ¿Qué difícil es darle el golpe, no? Pero bueno, cuando ya no hay remedio, no hay remedio.

Entre pláticas de tinto y humo con mis amigas pude notar la diferencia de circunstancias que estamos viviendo cada una; unas están por casarse, otras acaban de ser mamas, una que otra “por fin” tienen novio y algunas con relaciones que parecían eternas borraron su “para siempre” en un abrir y cerrar de ojos. Escuché a cada una de ellas alimentando mi alma con todas sus ilusiones, compartiendo sus alegrías como si fueran mías, pero igual pude sentir el dolor de aquellas que están pasando un mal rato, partiéndome el corazón en mil pedazos.

Así que hoy voy a escribir para ellas, las que “tienen el corazón roto”. Porque pareciera que a estas alturas y después de tantas experiencias, ya es hora de que no nos doliera tanto. ¿Estamos de acuerdo? Pero por desgracia parece que con los años el dolor se potencia.

Por un lado sentimos el paso de los años y todos las reglas sociales alcanzando nuestro andar, logrando solo a veces, ahogarnos en la desesperación de “tener lo que se debe de tener a nuestra edad”. Y lo aceptemos o no, es algo que nos duele cuando nos despedimos de quien tenemos enfrente. A la “mi$%&#” todas esas reglas de lo que deberíamos de tener o como deberíamos ser. La ÚNICA cosa que debemos ser en esta vida es SER FELICES, punto y se acabo.

A todas esas mamas, abuelas, tías que solo presionan a sus hijas a llenar los estereotipos de la “vida perfecta”, abran los ojos, sus hijas son PERFECTAS. Si, con defectos y virtudes, con aciertos y errores, porque no hay nada más perfecto que un ser que endereza su andar después de sus tropiezos. Que se enamora, que se equivoca, que le rompen el corazón a sus treinta años… y “chin” se le esta yendo el tren… ¿Cuál tren? Aquel, que se fue, por la razón que sea, que hoy antes de vivir una verdadera tragedia no tuvo el valor de mantenerse sobre las vías. No son “solteronas”, para mi son SUERTUDAS, de que en el momento justo se libraron de vivir dolores más fuertes, de vivir con un hombre que no podía COMPROMETERSE, con mayúsculas y cada una de sus letras.

Se preguntan, ¿Porqué las mujeres ya no “son como antes”? ¡Jolines!, ya no hay hombres como los de antes, no los machos que solo quieren una esclava por pareja. HOMBRES, hombres como mi abuelo, que entendían lo que era tomar de la mano a alguien y no soltarla, con sus genios y apapachos, con su dureza y su alegría… Jamás soltó a su pareja perfecta de baile. Y que hasta enfermo, sin poder pararse de la cama, cincuenta años después seguía buscando conquistar a la mujer de su vida.

Ya suficiente pasan sus hijas con lidiar con sus sueños, ilusiones y planes derrumbados, como para que las estén molestando con que ahí se deberían de haber quedado, porque ya no habrá otro. Se que no todas son así, yo tengo la fortuna de tener una mamá que siempre me hizo saber que era libre, esto es solo para aquellas a las que les queda el saco, aclaro.

Y a ustedes muchachitas con corazones destrozados, créanme que las entiendo, porqué cada adiós duele. “Y es entonces cuando te das cuenta que no importan los años, ni las veces que se haya roto un corazón, cada vez duele como si fuera la primera…”. Pero esta en nosotros cuanto tiempo más regalaremos a eso que no planea ir a ningún lado con nosotros.

Empecé esta entrada con el corazón roto, con lágrimas en los ojos y mis manos sin poder presionar una tecla sin titubear, no llevaba ni dos párrafos cuando recibí una llamada que de la nada volvió a inyectarme de energía… Creo que lo pueden notar en el cambio que dio el tono de mis palabras. Y aunque no puedo compartirles de que trato la llamada, puedo compartirles que cosas cambiaron dentro de mi en cuestión de segundos para ver mi cielo mas azul.

Te acaban de decir adiós, tal vez lo veías venir o tal vez no, lo decidiste tu, lo decidió el, lo decidieron los dos… como sea, se que siempre duele.

Que te aseguro, lo sé, habrá momentos en los que te sientas sola, que extrañes ese cariño, los besos, sus abrazos, los planes y verte reflejada en su mirada que te derretía por la forma en como te veía… Es valido, déjate llorar, siente ese dolor pero se dueña tu del sentimiento, no que la tristeza se apodere del resto de tu vida. No esperes a mañana para ser feliz, solo tenemos este segundo, el siguiente no sabemos.

Que habrá días que te sientas MUY bien, que el mundo esta de nuevo en tus manos. Ámalos y aférrate a ellos con todas las fuerzas que tengas, aún que se que a veces sentimos que no las tenemos. Sonríe cada instante que puedas y busca, en esos días de energía empezar a hacer algo para ti, ejercicio, cantar, bailar, cocinar, aprender cosas nuevas… para que uses ese “buen día” como impulso. Porque, ¿Qué crees? Seguramente te volverás a sentir triste de vez en cuando y esas cosas que comenzaste en tus días azules sirvan de paraguas cuando regrese un poco de la tormenta.

Tomate el tiempo de tu duelo a solas, dale el golpe al dolor… pero ponte un límite 3 horas, 3 días, 3 semanas, el que tu decidas, pero limítate. Se que suena difícil pensar en “controlar” esto, pero no lo veas así, tómalo como tu tratamiento para una gripa, duran 3 días, 7 días, cuando mucho llegan a 10 días. No te encierres más días de lo que debes por “esta gripa”, porque piensa en todo lo que puedes llegar a verdaderamente perder.

Después de este tiempo a solas, dilo al mundo, díselo a tus amigas, al cajero del súper… a quien tu quieras. Escucharte decir que se acabo, te ayuda a enfrentar que se acabo. Si te encierras en ti misma, sueles alimentar la nostalgia que solo te llevará a pararte de nuevo en medio de la tormenta. Y además nunca sabes, tal vez al decirlo te acabes enterando que hay uno que otro pez interesado, esperando a que estuvieras sola. (Real, le acaba de pasar a una amiga)

Toma papel y pluma, pantalla y teclado, (lo que a ti mejor te funcione) y empieza a reconstruirte. Aunque no te guste escribir, hazlo, te va ayudar. De un desamor nadie se muere, así que en este momento deja de cargar culpas, no pienses en hubieras, ni en los sueños que había a su lado, esto solo te hará más daño. Con papel y pluma enfrente, ve la maravillosa oportunidad que te da la vida de volver a empezar, de escribir nuevos sueños, nuevas metas, o de retomar aquellos que abandonamos por seguir el camino de alguien mas.

Entre más rápido abras tus puños y sueltes, más rápido la vida te sorprende. No necesariamente con una pareja, eso no es todo en la vida, puede sorprenderte con oportunidades que nunca imaginaste. Abre los ojos y déjate maravillar por la increíble manera en la que trabaja este universo.

Después de tantas líneas, creo que es más que suficiente. Las dejo por hoy pero no para siempre. Si estas triste lloremos juntas, pero no para siempre y salgamos adelante como “ave fénix”.


Mónica Makaco

sábado, 8 de febrero de 2014

NO SOY TAN BUENA AMIGA...


Hace un rato que no escribía ninguna entrada, así que mi cabeza explota de temas que quiero compartirles. Pero hoy, hoy empecé mi día completamente diferente a todos los demás y decidí escribirles sobre este cambio. Aprovechando que es el mes del Amor y de la Amistad, y hace un año solo me enfoque en hablar del amor. No quiero perder la oportunidad de hablar de la amistad, ya que de algo estoy segura, este año y medio no hubiera sobrevivido si no fuera por la amistad.

Puedo considerarme una persona que tiene la bendición de tener muchas amistades, y a la vez amigos íntimos muy pocos, creo que como la mayoría de las personas. En este tiempo de autoconocimiento, de armarme y desarmarme infinidad de veces, conociéndome y re-conociéndome, haciéndome responsable de lo que me corresponde y otras inundándome de culpabilidad… creo que hoy, como algunos otros días, tuve una “iluminación”. Pareciera que hasta hay alguien que habla conmigo en mis sueños y me hace entender todo mas sencillo que si le doy mil vueltas despierta.

A lo largo de mi vida han habido varias ocasiones en las que me llaman “mala amiga”, “egoísta”, que no pongo interés o que no me importan las otras personas… la verdad es que muchas veces me llegue a sentir demasiado mal por estos juicios que recibía hacia mi persona. Pero hoy tras muchas experiencias y un poco de madurez puedo no hacerlos míos, tomar las cosas que me hagan mejor persona y soltar aquello que me hace daño. Todo ha sido gracias al proceso de conocerme mejor y sincerarme completamente conmigo, nadie me conoce mejor que yo, nadie mas que yo, sabe realmente lo que sucede en mi y porque tomo las decisiones que tomo.

A pesar de que me encanta socializar y rodearme de gente… derepente me sale un gen de cangrejo ermitaño, en donde me aíslo de todo y pareciera que no me importa si se derrumba el mundo a mi alrededor. Pero la verdad es que hay tres razones por las cuales me convierto en un hermoso cangrejito.

La primera… no por importancia, solo para tener orden en mi cerebro y poderlas explicar un poco mejor, es cuando bloqueo a gente de mi vida porque me han hecho daño, cuando he salido lastimada y verdaderamente no puedo conciliar en mi corazón volver a tenerlos cerca. Que ha decir verdad es de las cosas que mas trabajo me cuesta, porque cuando le abro mi corazón a alguien pretendo tenerlos ahí para siempre. Este es uno de mis crecimientos como persona más importantes en este tiempo, aprender a decir que NO, no te quiero cerca y NO, ya no voy a permitirme que pases encima de mi. Yo soy una persona a la que le molesta tanto el conflicto, que era capaz de modificar todo en mi con tal de evitar los problemas, pasando encima de mi. Una vez mas, no culpo a nadie, esa decisión la tomaba yo y yo era la única que permitía que me estuvieran usando de tapete. Por fin entendí que es completamente valido ser un poco “egoísta” y alejarte de estas sanguijuelas energéticas que solo van apagando tu luz al tú entregarles el poder. Recuerda, si alguien te trata mal, no es culpa de ellos, es tu responsabilidad respetarte tú y sacarlos de tu vida.

La segunda razón que he notado en mi para ser ermitaña, es una que me duele mucho admitir. Me he alejado de gente que me quiere, que me ha demostrado con lágrimas y desvelos que esta a mi lado, que yo amo y adoro con todo mi corazón, pero que hoy por el duelo que estoy viviendo y que hay cosas que me quedan por sanar me cuesta trabajo estar cerca. No precisamente por egoísta… tal vez porque es algo que me falta de digerir, de madurar. No se si a ustedes les ha pasado que su mejor amiga esta pasando por la mejor etapa de su vida y al estar cerca lo único que ocasiona en ti es un mar de emociones, porque al mismo tiempo de que compartes su felicidad solo te recuerda todo lo que añoras. Y se que esto suena muy infantil, me cuesta mucho trabajo admitirlo, a decir verdad, ya que siempre he trabajado en ser la mejor versión de mi misma y esta faceta de “envidia” que siento me enoja de sobremanera conmigo misma. Pero creo que admitirla es el primer paso para derrotarla.

En este mismo proceso de aprender a decir que NO, aprendí a decirme que NO a mi también. Como se los decía en las líneas de arriba, puedo dar la vida con tal de ver a los que me rodean mejor… sin importar el precio que yo tuviera que pagar. Un libro que me ayudo mucho en esto es el de “Mamas de teta grande” de Fernanda Familiar, en donde parecía que me conocía a la perfección en cada uno de sus párrafos y había pasado vigilándome mis 26 años de vida. Si bien creo que es de suma importancia darte a los demás, logre entender que a veces no somos lo mejor para estar en esos momentos difíciles, no ser egocéntricos y creer que podemos con todo. Para explicarme un poco mejor les compartiré un ejemplo que tal vez me costo una amistad, yo, como los que ya me han leído saben que estoy pasando el momento mas difícil de mi vida hasta hoy y la verdad no tengo cabeza ni fuerzas para nada mas que para lidiar con esto. Una amiga paso por uno de los momentos mas difíciles que yo pudiera imaginar justo al mismo tiempo que yo me veía envuelta en uno mas de los huracanes que han atacado mi mundo. A mi me hubiera gustado poder acompañarla en cada momento, así como ella lo ha hecho a lo largo de todo este tiempo conmigo. Se que antes les he escrito que “el que quiere encuentra la manera, si no quiere encuentra pretextos”, pero este no fue el caso, no eran pretextos, eran razones reales que requerían de mi toda mi concentración y energía. Que hice lo que pude, genuinamente dí lo que podía dar en ese momento. Suelo botar todo con tal de estar ahí para los demás, y mucho también porque me ayuda a evadir mis problemas al tratar de resolver los de los demás; pero llego este momento en mi vida en donde ya no me puedo permitir hacer eso. Hacerme responsable de mi vida, de lo que verdaderamente es trascendental en mi vida y aprender que con todo el dolor de mi corazón no podía correr al llamado de alguien, me costo mucho mas de lo que se imaginan. Porque además sabia que aun si hubiera corrido a estar ahí, realmente no hubiera “estado”, mi cabeza y mi corazón iban a estar “egoístamente” pensando en todas las decisiones que tenia que tomar y no realmente funcionando como un apoyo… hubiera sido un mueble que lejos de ayudar hubiera solo ahogado el cuarto con mis problemas. Reconocer mi debilidad, aceptar que no iba a ser capaz de “estar”… Dios, que difícil ha sido.

La tercera y la que menos me agobia, es que “respeto”. ¿Cómo que respetas?, se preguntarán. Pues si, yo reconozco que soy una persona que no tiene problemas con hablar de si misma, de externar sus preocupaciones, problemas, sueños y anhelos; pero al mismo tiempo se que no todo el mundo es como yo y hay muchas personas a las que no se les da tener “verborrea”. Cuando estoy con mis amigas no me gusta estarlas interrogando de sus vidas, sus problemas, sus relaciones… creo que quien quiere ser escuchado habla. He aprendido que este exceso de respeto y de no interrogar, a muchas les ha parecido que soy “egoísta”, así que he aprendido a callar, porque a veces cuando dejas que el silencio exista ellas encuentran la paz para poder expresarse.

Tal vez daba por sentado que la gente a la que quiero, sabía que la quiero… que sabían que yo ahí estaba para brindarles mis brazos, mis hombros, mi corazón… pero no, me excedía en respetar sus espacios, esperando que si ellas me necesitaban me lo iban a hacer saber. Por eso hoy decidí dejar atrás mi “respeto” y hacerles saber que pienso en ellas, que ahí estoy… que telepáticamente no iban a saber que por las noches en mis peticiones son un renglón importante. Tal vez también estoy dejando a un lado mi “egoísmo” de solo pensar en mis problemas y hasta como terapia para limpiar mi mente. Siguiendo un consejo que alguna vez por ahí recibí… muchas veces cuando tenemos un problema ponemos en pausa nuestra vida esperando a que pase para retomarlo todo… pero la vida sigue aunque en nuestra mente pongamos pausa y entre mas nos tardemos en ponerle “play”, mas difícil nos será retomarla.

Hoy decidí ser la mejor versión de mi misma, no esperando a que pase el frente frío número 2,637 de mi vida para poder vivir. Retomo desde hoy las riendas de mi vida, con las capacidades que hoy tenga daré lo mejor para hacerle saber a todas aquellas personas que me importan lo mucho que me importan. Que si me siento “fuera” de todo, mas “fuera” estaré entre mas me tarde en querer entrar.

Agradezco a todas aquellas amistades que ha pesar de que soy un cangrejo ermitaño, Houdini y “egoísta” en estos momentos, nunca han dejado de quererme, no se que sería de mi vida si no supiera en mi corazón que ahí están para mi.

Los dejo por hoy, con esta pequeña reflexión, que acabo siendo un desahogo mas de mis preocupaciones, imagino que habrá alguien por ahí que me lea que esta pasando algo similar, así que espero que al leerlo de esta personita les ayude a ver con mas claridad sus situaciones.

Mucha luz, mucho amor, mucha energía. Gracias por leerme y ser de tanta ayuda. Les deseo de regreso diez veces lo que me desean a mi.